El ritmo que me gusta en las películas. Parece ser una tendencia entre los realizadores vanguardistas: ritmo extremadamente pausado, pocos o casi inexistentes diálogos, planos cortados, edición no lineal. Esta directora se las trae: va construyendo una tensión que provoca en el espectador querer olvidar u ocultar lo que sabe de antemano de la historia. Lo presientes pero lo niegas.
Esta película provoca muchas discusiones y levanta muchas preguntas, sobre el rol o responsabilidad de los padres en esos hijos que cometen delitos tan terribles, ¿qué hizo mal esa madre, o si por el contrario, ese niño estaba condenado desde nacer? ¿Y la figura del padre, su rol en esta tragedia es correcto, su ceguera contribuyó al terrible desenlace, o no había nada que él pudiera haber cambiado?
Me impresiona que una directora con apenas 3 películas (7 títulos en total, incluyendo cortometrajes) en su portafolio haya hilvanado y creado una historia tan pacientemente contundente. Sin saber de sus antecedentes, alabé la fotografía de la película, descubriendo luego que Lynne Ramsay fue también camarógrafa y DP, lo cual se evidencia ampliamente en esta puesta en escena. Por cierto, como chisme de la industria, ella inició en el proyecto The Lovely Bones y fue casi "sacada" del mismo por Peter Jackson quien hizo de él una película muy triste pero decepcionante.
Independientemente de todos los matices presentes en la obra, su carga emocional trasciende y vive casi totalmente sobre los hombros de la gran Tilda. Pocas actrices pueden llevar una película tan intensa, sin diálogos, donde lo que no se dice es mucho peor que lo que sí se dice, y sali tan magistralmente bien parada. No es verdad que ni Viola Davis ni Olivia Spencer actuaron mejor que Tilda Switon en esta pelicula (y me atrevería -osaría- decir que la gran Meryl Streep tampoco, pero esa no la he visto). John C. Reilly como siempre fantástico en su papel de marido sufrido. Ahora bien, quienes se merecen todos los galardones son los tres actores que interpretan a Kevin, sobre yodo el pequeño. No quiero imaginarme la cantidad de horas requeridas para filmar esa escena con la pelota roja.
Todo el que tenga hijos debe verla, y el que no tenga también. Como cine, es una muestra excepcional. Como tema de discusión, inmejorable. Como muestra del estado actual de una sociedad nihilista, escalofriante.
Les dejo una entrevista de la directora y Ezra Miller, el actor que hace de Kevin.
2 comentarios:
No se si tendré que tomar varios calmantes, antes de ver esta película, que desde ya se, que será fuerte..ahora por el solo uso de la palabra Nihilista hay que verla!
Vi la película hoy...excelente! Capta la atención desde el principio, y los "flashes" de memoria te muestran lo estrictamente necesario para ir atando cabos.
Muy bueno tu post, como siempre!
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