Este fin de semana se estrenó en España la más reciente obra del genial Pedro Almodóvar, generando como siempre opiniones de todo tipo. Me refiero a ella cuando aún ni siquiera los cines dominicanos la anuncia entre sus próximos estrenos porque yo, a pesar de cualquier crítica o ataque, la estoy esperando por minutos.
Almodóvar es uno de esos autores cuyo cine no deja indiferente a nadie: lo odias, no lo entiendes y por tanto lo odias, o lo amas. No hay medias tintas con el director nacido en Calatrava. Que si está sobrevalorado, que no es prfeta en su tierra, que ha perdido su ironía, que su humor negro se ha desteñido desde Kika.
La piel que habito trata sobre un cirujano plástico atormentado por la muerte de su
esposa busca la técnica que hubiese podido salvarla experimentando con
una especie de hamster (muy macabro, sí). Fue unos de los estrenos más esperados en Cannes, donde Antono Banderas, como siempre, fue la máxima estrella.
Ayer precisamente, Gaby Castellanos, CEO de Sr.Burns, una de las principales agencias de publicidad digital en España, en buen dominicano "acabó" con ella, criticando una trama deficiente, talentos sobreactuados, especialmente Banderas y, lo que más me chocó, una dirección de arte regular. La dirección de arte siempre ha sido uno de los elementos destacables y representativos de Almodóvar.
Lo que sí es cierto, es que ‘La piel que habito’ fue el estreno con mejor
promedio por pantalla del fin de semana, y mejoró las cifras
obtenidas por ‘Los abrazos rotos’ en su primer fin de semana. Nota original aquí.
Como dije, espero paciente a que una de las grandes cadenas de salas de cine criollas decida que ya es hora. Seré fiel a Pedro, y espero perdonarle Volver.
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