Mucha gente encuentra incómodas similitudes entre esta película y el caso de la niña inglesa desaparecida en Portugal, lo que causó una ligera controversia previo a su estreno. Controversia barata puesto que el autor de esta historia (el mismo de la maravillosa Mystic River), la publicó en 1998, y que algunos críticos culpan de que esta película no gozara de mayor audiencia. Personalmente yo, encuentro el mayor parecido en la actriz elegida para la niña desaparecida que es prácticamente idéntica a la Madeline, pero después, lamentablemente, es como tantos y tantos casos de niños y niñas desaparecidos, de sus propias casas.
Como opera prima de Ben Affleck siento que acaba de demostrar cuál de los dos era el brillante en aquél binomio que sorprendió a la Academia en 1997 (Good Will Humting para los despistadísimos). Un estilo de dirección que te mantiene atento, ese entrar y salir de las reflexiones del personaje principal, cómo logra que alguien tan extremadamente rígido en sus convicciones te agrade, lo entiendas aunque no lo aceptes. Las actuaciones y sus intérpretes inmejorables: desde leyendas como Morgan Freeman y Ed Harris, hasta la Michelle Monaghan que nunca la había visto en mi vida.
Lo único que no me gustó fue la escena en que el policía es herido de bala en el porche de la casa del pedófilo; pudo haber sido más rápida. Por momentos me sentí defraudada cuando creía que se había convertido en "otra película de policías más", pero como toda buena obra, se reivindica a sí misma.
Ben: ya no tienes que filmar clavitos para comer, éste es tu trabajo.
Como opera prima de Ben Affleck siento que acaba de demostrar cuál de los dos era el brillante en aquél binomio que sorprendió a la Academia en 1997 (Good Will Humting para los despistadísimos). Un estilo de dirección que te mantiene atento, ese entrar y salir de las reflexiones del personaje principal, cómo logra que alguien tan extremadamente rígido en sus convicciones te agrade, lo entiendas aunque no lo aceptes. Las actuaciones y sus intérpretes inmejorables: desde leyendas como Morgan Freeman y Ed Harris, hasta la Michelle Monaghan que nunca la había visto en mi vida.
Lo único que no me gustó fue la escena en que el policía es herido de bala en el porche de la casa del pedófilo; pudo haber sido más rápida. Por momentos me sentí defraudada cuando creía que se había convertido en "otra película de policías más", pero como toda buena obra, se reivindica a sí misma.
Ben: ya no tienes que filmar clavitos para comer, éste es tu trabajo.
es que esos golpes de creatividad se le dan cada diez años, por eso no sirve
ResponderEliminarhahaaha
ResponderEliminarGolpes de Creatividad cada diez años!!!