A finales de los años 60 Kim Casali crea unos dibujos que llegaron a ser muy populares, estos personajes se llamaron “Él“ y “Ella”, no tenían nombres propios podían representar a cualquier hombre o mujer, chico o chica… pero eso sí, enamorados. En 1970 ya se conocían por todo el mundo.
“Amor es”, seguida de dulzuras como “...sentarme a tu lado a contemplar la luna”., fueron las frases que más repitieron los labios de los que estaban amando.
Imágenes a veces tiernas, a veces con una gracia irresistible, la situaciones innumerables con las que se van encontrando un ”él” y una “Ella” cualesquiera en el momento que son víctimas de las terribles flechas de Cupido.
Ella podía ser la secretaría que encontramos a diario en el autobús o en la cafetería, él, podía ser un oficinista o el dependiente de la tienda de la esquina. En resumen, se parece a la mayoría de nosotros: como nosotros aman, sufren, se pelean, reconocen sus errores o son obstinados, pero saben reconciliarse con una carcajada y sobre todo, sobre todo “ella” y “él” sólo quieren amarse. He aquí el prodigioso éxito que tuvieron en los años 70 y principios de los 80. Ellos formaron la pareja más popular del genial Kim Casali.
Sobre estos personajes se crearon cromos, tarjetas, tazas, libretas, carteras, posters y un sin fin de artículos más. Fue el regalo ideal entre los que se amaron en esa época.
En la época que aquí empezaron a publicarlos (salían siempre en El Caribe) las jóvenes los coleecionaban ávidamente; conozco algunas que tenían carpetas y gavetas llenas de los mismos. Yo me los encontraba cursis al cubo, pero hoy... ya no tanto. Más conociendo la intención de su creadora, los encuentro conmovedores. Cómo ha cambiado el cuento.
“Amor es”, seguida de dulzuras como “...sentarme a tu lado a contemplar la luna”., fueron las frases que más repitieron los labios de los que estaban amando.
Imágenes a veces tiernas, a veces con una gracia irresistible, la situaciones innumerables con las que se van encontrando un ”él” y una “Ella” cualesquiera en el momento que son víctimas de las terribles flechas de Cupido.
Ella podía ser la secretaría que encontramos a diario en el autobús o en la cafetería, él, podía ser un oficinista o el dependiente de la tienda de la esquina. En resumen, se parece a la mayoría de nosotros: como nosotros aman, sufren, se pelean, reconocen sus errores o son obstinados, pero saben reconciliarse con una carcajada y sobre todo, sobre todo “ella” y “él” sólo quieren amarse. He aquí el prodigioso éxito que tuvieron en los años 70 y principios de los 80. Ellos formaron la pareja más popular del genial Kim Casali.
Sobre estos personajes se crearon cromos, tarjetas, tazas, libretas, carteras, posters y un sin fin de artículos más. Fue el regalo ideal entre los que se amaron en esa época.
En la época que aquí empezaron a publicarlos (salían siempre en El Caribe) las jóvenes los coleecionaban ávidamente; conozco algunas que tenían carpetas y gavetas llenas de los mismos. Yo me los encontraba cursis al cubo, pero hoy... ya no tanto. Más conociendo la intención de su creadora, los encuentro conmovedores. Cómo ha cambiado el cuento.
wow!!!! cuanto tiempo!!!
ResponderEliminarxoxo
er pipo!..yo era uno de ellos!..jajajj..que axficia me di de una jeva!..y le mandaba esos muñequitos..total, nunca me hizo caso la mardita...
ResponderEliminarfe de errata: asfixia, maldita...ok..todo aclarado
ResponderEliminar(eh ma..por aqui uno escribe como quiera, y lo entienden..)
Yo los recuerdo vagamente... mi tia mas pequeña tenia una mascota llena de esas figuritas jajajaja
ResponderEliminarPor mi madre que yo creia que eso era de los otros dias
ResponderEliminaryo era (soy) enferma con las libretas, hojas de cartas y stickers y tenía una libreta de amor es que todas las hojas decían algo diferente y creo que solo llegué a utilizar una o dos , no quería usarlas porque no habían repetidas jajajaja...también venían en tarjetitas plastificadas, recuerdo que tenía tantas tarjetitas que mi mamá me compró un tarjetero de esos de oficina jajajaja vine a botarlo hace menos de dos años, cuando me casé :oP
ResponderEliminarYo tenía muchas. Salían en revistas españolas y yo las recortaba. Ay que tiempo esos!!
ResponderEliminarWao, ya se me habian olvidado esas figuritas! y me acorde, la verdad es que eran muy tiernas.
ResponderEliminarGracias por hacernos recordar Gitti!
la verdad es que no me acordaba de estos muñequitos, pero cuando los vi, vinieron miles de recuerdos...la verdad es que eran divertidos.
ResponderEliminarAy que lindoooooooooo!
ResponderEliminarDe verdad.. eso sí que es un clásico... hasta en las tarjetas de felicitaciones y de "recordándole el amor" a cualquiera de tus seres queridos.
ResponderEliminarme encantan...
ResponderEliminarEncontraste una viga!!! Hace un tiempo leí la historia de Kim y del amor tan grande que sentía por Roberto, su novio italiano, que la llevaron a inventarse estos muñequitos que los representaban a ellos mismos (Kim y Roberto). Ella comenzó a mandarle notitas a él con estos muñequitos y luego la publicación es historia. Lo que más me sorprendió fue que Kim salió embarazada del último hijo de Roberto después de que él había muerto... La inseminaron artificialmente! Eso es amor del negrito!
ResponderEliminar=)